Para conseguir una casa antiestrés solo necesitas hacer pequeños cambios en tus espacios.

A continuación varios y prácticos tips que te ayudarán a ambientar tu casa de forma armónica y dejar fuera cualquier signo de estrés.

1. COLORES QUE RELAJAN

Si quieres un espacio de relajación los colores serán tus grandes aliados, ya sea pintando una pared o incorporándolos a través de muebles, adornos y accesorios.

El azul y el celeste son recomendados como tonos que reducen la presión arterial. Puedes combinarlos con otros colores como el blanco, que refuerza las características relajantes o con tonos pasteles.

 

2. DILE SÍ A LA NATURALEZA

Las plantas de interior siempre han sido grandes aliados contra el estrés, purifican el aire y además lucen bien en cualquier lugar de la casa.

Sin duda, ten en cuenta que este tipo de accesorios requerirá tiempo de cuidado. Si tienes poco tiempo, opta por plantas artificiales, no serán lo mismo, pero darán ese toque de verdor.

 

3. ORDEN y CALMA, antídotos antiestrés

El orden produce calma y da seguridad, por lo que es un tremendo aliado contra el estrés en casa.

Las cajas, canastos, percheros y zapateras se vuelven elementos importantes a la hora de mantener el orden.

 

4. UN DORMITORIO ZEN

Elige una decoración sencilla, colores suaves y ropa de cama con materiales como el algodón o el lino.  Suma una lámpara de mesa para dar calidez.

 

5. La simplicidad en el aire: AROMATERAPIA

Los romas son grandes aliados de la relajación y la tranquilidad. Crea espacios únicos y llénalos de aromas incorporando velas y difusores.

 

6. ESPACIOS LUMINOSOS

La luz determina en gran medida nuestro estado de ánimo y es capaz de hacernos sentir más optimistas y tranquilos.

Utiliza lámparas con luces indirectas o difusores.

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¡Disfruta de tu casa antiestrés! Verás lo bien que le hace a tu día a día.

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